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Veintisiete de enero: Dos años sin ti

Mi abuelo partió de este mundo el 27 de enero de 2020. «Se despidió en invierno» nació dentro de ese íntimo proceso de duelo y reconstrucción emocional que vino después de su muerte. El primer poema de este libro, «Veintisiete», es justamente la pieza encargada de abrir la obra y de establecer desde el principio cuán especial es esta obra para mí.

Hoy se cumplen dos años sin escuchar tu voz. Y sin embargo, ayer en la tarde charlamos y nos reímos de lo rápido que pasa el tiempo. Creo que en este rato he confirmado algo: La distancia solo es fría si no la atraviesa el amor.


El 27 de enero de 2020 supimos que mi abuelo ya no estaría en este plano con nosotros. Ese mismo día entendimos que jamás iba a dejarnos. Haberle amado, cuidado y respetado tanto nos dio la certeza de que su partida sería poco más que un cambio de hábitos. Que sería cuestión de buscarle en otras partes y de recordarle lleno de vida, como decía él recordar a los que amaba.


Creo que también habrá sido ese día cuando, sin darme cuenta, decidí amontonar lo nuestro y convertirlo en algo más que memoria. Comencé a escribir este libro para rescatar a mi abuelo del olvido. Al final, como habrán imaginado, fue él quien extendió la mano y me salvó a mí.


«Veintisiete» es el portero que toma tu boleto y te invita a pasar. Es el poema que te ayuda a subir las escaleras del barco, deseándote buen viaje. Por eso, siempre será una pieza muy especial para mí.


Por papá Junior y por todos los que ya se despidieron, ¡celebremos el placer de recordarles y vivir!

¡Déjame saber qué piensas!

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